Cuando nos invitan a una boda, la duda más común que nos surge es en cuanto al vestuario. Los invitados se preguntarán cuál es la forma más adecuada de acudir a una boda, y qué reglas básicas hay que seguir tanto para hombres como para mujeres para lograr un look perfecto para el evento.
Las bodas no dejan de ser eventos sociales en los cuales todos deseamos causar una buena impresión y escoger un traje o vestido que nos haga sentir bien. Estas ceremonias también llevan consigo un protocolo nupcial que los invitados deberán tener en cuenta. Por ejemplo, la norma imprescindible es que ningún invitado podrá acudir de blanco, ya que este color está reservado exclusivamente para la novia. Si se desea acudir de blanco se debe consultar primero con la novia y obtener su permiso, pero por respeto a ella la mayoría de veces no se opta por usar este color. El color negro tampoco se podrá utilizar, ya que según el protocolo solo se puede acudir de negro a un funeral.
Otra de las reglas de vestuario a tener en cuenta es en cuanto a los tocados y accesorios de cabello. El tocado ha adquirido cada vez más popularidad en los últimos tiempos y se ha convertido en tendencia. Sin embargo, es importante recalcar que tanto las pamelas como los tocados solo se permiten utilizar en una boda de día. Además, no se permite retirarse el accesorio de pelo en todo el evento, ni en el convite. Solo se podrá retirar cuando dé comienzo la parte del baile.
Esta última norma de no poder quitarse los accesorios también es extrapolable a la vestimenta masculina. Aunque los hombres no tienen tantas normas como las mujeres, deberán tener en cuenta que no podrán quitarse la chaqueta, americana, pajarita, los puños y otros accesorios en ningún momento de la ceremonia o convite.
Otra regla que encontramos en el protocolo nupcial es que la madre del novio deberán escoger en primer lugar el color de su vestido y también la forma que ella desee, y comunicárselo a su consuegra para evitar repetir tonalidad.
Otro punto a tener en cuenta es el tipo de boda a la que vamos a asistir. Las bodas religiosas suelen ser más tradicionales y la vestimenta más recatada, por lo que deberemos evitar que el largo de nuestro vestido o falda sea muy corto. Si llevamos los hombros al descubierto, para entrar a la iglesia debemos cubrirnos con un chal o chaqueta, por respeto. Es importante evitar enseñar más de la cuenta. Por otro lado, en las bodas civiles se tiene más libertad para poder vestir como deseemos. Al ser bodas más informales podemos escoger nuestra vestimenta a nuestro gusto, respetando las normas aquí mencionadas.
Por otra parte, debemos tener en cuenta el dress code marcado por los novios. En los últimos tiempos se ha popularizado el organizar bodas temáticas en las cuales se deba vestir de una forma concreta. Por ejemplo, en el caso de las bodas medievales, ibicencas… que requieren de una vestimenta muy especial para la ocasión y alejada de la solemnidad tradicional de este tipo de eventos.
Pero sin duda el punto más importante a tener en cuenta a la hora de escoger nuestra vestimenta para acudir a la boda será el momento del día en el cual se celebre esta. Tanto para el día como para la noche existen diferentes reglas para poder vestir adecuadamente según la ocasión.
Cómo vestir para una boda de día
Las normas de vestimenta para acudir a una boda de día son más relajadas y las invitadas podrán optar por acudir al evento con vestido, mono, traje, falda y camisa… Aunque la opción más popular sigue siendo el vestido, podemos lograr looks más originales y rompedores apostando por otros modelos.
Lo ideal en una boda de día es llevar un vestido por debajo de las rodillas (de corte midi) o algo más corto, pero siempre sin caer en la vulgaridad. También se puede optar por vestidos de corte asimétrico, de palabra de honor…
En cuanto a los colores, en las bodas de diario se suelen utilizar tonos claros como puede ser el azul, el amarillo, el verde… Esto dependerá también del gusto de la invitada. En cuanto a los accesorios, podemos complementar el look con un chal o chaqueta, un clutch, una pamela o tocado…
Cómo vestir para una boda de noche
En las bodas de noche escogemos vestidos con tonalidades más oscuras y también podemos optar por el uso de la pedrería, encaje, lentejuelas y otros brillos tanto en el vestido como en el clutch o los zapatos. Los vestidos largos son muy populares en este tipo de eventos, pero también reinan los vestidos de tipo cóctel. También podemos escoger un mono largo, que nos aportará mucha elegancia y personalidad, además de ser una prenda de tendencia en este tipo de celebraciones.
En cuanto a los accesorios de pelo, está prohibido usar elementos que protejan del sol como las pamelas, pero sí podemos optar por un tocado sutil y elegante. El maquillaje para una boda de noche se elaborará con sombras más oscuras y marcadas, pudiendo optar por un atrevido smokey eye.
Como verás, es importante cumplir con el protocolo establecido y también respetar el dress code establecido por los novios. Lo cierto es que las tradiciones de las bodas en cuanto a la vestimenta han ido evolucionando con el tiempo y cada vez se tiene más libertad para escoger formas y estilos de vestidos que más nos gusten y favorezcan. Lo importante es acudir a la boda sintiéndonos a gusto con nuestra elección para poder disfrutar de este evento y celebrar junto a la feliz pareja de casados su esperado enlace.